Claro que no es lógico, no es de esas historias en las que tienes que pararte a pensar si lo haces o no, porque no da tiempo a eso. Sabes que vas corriendo, directa hacia un precipicio, pero cuando se quiere de verdad, ¿todo lo demás importa?Esa locura que nunca habías pensado hacer, algo que hace unos meses te hubiera parecido impensable...ahora lo harías, una y mil veces, pero sólo con él. Porque claro que harías cualquier cosa, cualquier locura si él está contigo, porque si es él el que te coge la mano todo empieza a tener sentido.
No piensas, no quieres pensar en lo que vendrá después, en que el precipicio sigue ahí, cada vez más cerca y tú aceleras, en que cada vez corres a más velocidad.
Sientes que él todavía está contigo, que corre a tu lado, piensas en todos y cada uno de esos días que pasáis juntos, esos días que sólo podrían definirse como increíbles, como en un sueño...un sueño que esta vez sí es real.Ojalá nunca acabe todo esto, piensas sin parar. Ojalá esta aventura no tenga final, porque ya sabes de sobra que nunca volverás a vivir algo así. Nunca.
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